El Financiero
A cientos de miles de kilómetros de la Tierra, los satélites Sentinel-1 son como ojos en el cielo que muestran por qué los precios del petróleo en Estados Unidos cayeron por debajo de cero y por qué es probable que gran parte del crudo en otras partes del mundo siga la misma trayectoria. El satélite transmite señales de radar hacia los enormes tanques metálicos que almacenan petróleo y recaba datos que se utilizan para calcular la cantidad de crudo que hay dentro. El mensaje es alarmante: el almacenamiento para petróleo se está agotando.
Es algo que nunca antes había sucedido, y el mercado apenas comienza a adivinar lo que significará. Los expertos dicen que podría ser cuestión de semanas antes de que se agote el espacio para almacenar crudo. El resultado sería precios del petróleo cercanos a cero en muchas partes del mundo, y en algunos casos, podrían ser negativos. “Nos acercamos al límite de los tanques en todo el mundo para finales de mayo o principios de junio”, dijo Florian Thaler, de Oilx, una firma de análisis que utiliza los datos satelitales.
El caos en el mercado petrolero estadounidense del lunes podría presagiar lo que sucede a nivel mundial, si otros tanques comienzan a llenarse. También muestra que el mercado probablemente anticipará el almacenamiento máximo, en lugar de esperar a un descalabro cuando se sobrepase el límite. Algunos productores de petróleo han vuelto a redactar sus contratos para evitar que los precios se vuelvan negativos. El martes, la fiebre de ventas continuaba.
Los futuros de Brent para entrega en junio perdían 15 por ciento, al negociarse cerca de 16 por barril, el más bajo en casi 21 años. Los principales crudos europeos y africanos, que se negocian con un descuento respecto al Brent de referencia, se venderán a menos de 10 dólares, e incluso, a menos de 5 dólares en algunos casos.