Esta es la nueva crisis ambiental de la armadora alemana en Puebla
Huffignton Post/MTP
Noticias Que se pierdan las cosechas de los campesinos, pero no tener pérdidas por 381.6 millones de pesos en este año por daños a autos recién fabricados en Puebla por granizadas. Esta es la lógica con la que respondieron directivos de la empresa Volkswagen México este lunes, tras el reportaje de MTPNoticias sobre el uso y alcances de cañones antigranizo. Los directivos de la armadora mantuvieron su postura de continuar con el bombardeo de nubes, pese al llamado del gobierno estatal para suspender esta actividad y evitar un conflicto social. Julio Marín Leal, director de Gestión Ambiental y Sustentabilidad de la fábrica alemana, reconoció que cada que se forma una nube se activan tres cañones, llamados “dispositivos sónicos antigranizo”, para ahuyentar granizadas, con tronidos cada siete segundos. Aunque campesinos y especialistas entrevistados por MTPNoticias afirman que el uso de esta tecnología sí ahuyenta las lluvias debido a que redireccionan las nubes, Marín Leal aseguró este lunes que estos dispositivos no frenan el agua y que “solo afecta en un radio de 1 kilómetro”.
VOLKSWAGEN SE NIEGA A PERDER MILLONADA
La única razón por la que Volkswagen México se niega a frenar esta actividad es para no perder 20 millones de dólares en daños (mdd) en autos nuevos. Esto equivale a 381.6 millones de pesos, de acuerdo con el tipo de cambio de este 13 de agosto. “Está en el orden de los 20 millones de dólares los daños. Le puedo decir que en el último año 2017 tuvimos esa afectación”, dijo Marín Leal cuando se le cuestionó sobre el costo de daños que busca impedir. Mientras la compañía busca negociar con el gobierno estatal para no impedir que los cañonazos continúen, los afectados exigen un pago por las 2 mil hectáreas de cosechas que han perdido, mismo que adjudican a falta de lluvias por estos cañonazos. No obstante, Marín Leal aclaró que la fábrica de autos no está dispuesta a negociar con los quejosos y cubrir los 70 millones de pesos en los que calculan sus pérdidas.