La medida significa un auténtico cambio de paradigma en un país aquejado por la violencia de género
Infobae
Lucía era una muy buena estudiante. Cursaba el tercer año de primaria y era muy cercana a su profesor, quien se ganó su confianza. Él le pedía que se quedara después de clase para ayudarle a arreglar el salón y una tarde, la violó. Lucía no dijo nada, hasta que empezó a sentirse muy extraña. Cuando fue al médico con su mamá, tenía 15 semanas de embarazo, por lo que no se le permitió abortar debido a que su embarazo ya estaba muy avanzado. Lucía, de sólo 9 años de edad, fue obligada a ser madre. Su caso, recogido por la Organización No Gubernamental (ONG) #NiñasNoMadres, es sólo uno de los que por desgracia, ocurren constantemente en México. Y es que aunque la ley asegura que las mujeres y niñas víctimas de violación tienen derecho a acceder a un aborto legal en todo el país, su implementación parece ser subjetiva y muchas mujeres siguen enfrentando barreras para acceder al servicio. Pero, las cosas podrían cambiar. Este lunes, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avaló la Norma Oficial Mexicana (NOM) 046-SSA2-2005 que ordena a todos los hospitales públicos interrumpir los embarazos resultados de violación, sin necesidad de que la víctima denuncie el delito ante el Ministerio Público o que alguna autoridad lo autorice.
De esta manera, las instituciones de salud no podrán negarse a realizar la práctica. La modificación a dicha norma establece que, en el caso de niñas menores de 12 años, la solicitud se realizará por conducto del padre y/o la madre, o a falta de estos, su tutor. Con ocho votos a favor, el máximo tribunal del país determinó que son infundadas las controversias promovidas por los estados de Baja California y Aguascalientes, en contra de esta regulación, que permite la interrupción legal del embarazo en los hospitales públicos del país, cuando las mujeres han sufrido violencia sexual. “Me parece que este Tribunal Pleno tiene que mandar un mensaje muy claro de que se protegen los derechos de las mujeres, y esta norma tiende a hacer mucho más laxo, fácil y sencillo el acceso a este derecho Constitucional cuando las mujeres han sido afectadas de manera grave en su libertad sexual”, dijo Arturo Zaldívar, presidente de la SCJN. Arturo Zaldívar recordó que ha votado reiteradamente por el derecho de todas las mujeres a interrumpir el embarazo, “pero en el caso de violación, me parece que es casi incuestionable que ese derecho sea accesible, cercano y rápido”. “Me parecería muy grave poner requisitos excesivos e interpretaciones rigoristas de cómo se debe modificar una Norma Oficial Mexicana para no generar cierta incomodidad a las autoridades que la van a aplicar, perjudicando el derecho de las mujeres y las niñas”, insistió.