Morena, PT, PES, PRI y Partido Verde criticaron el hecho de que el gobernador no se haya presentado en el recinto legislativo para la entrega de su Informe
Dulce Gómez
Diputados de la LX Legislatura no perdonaron la ausencia del gobernador José Antonio Gali Fayad al Congreso del Estado para la entrega de su segundo y último informe de gobierno, quien, de último momento, decidió enviar en su lugar al titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) del Estado, Ignacio Alvizar Linares, a pesar que, en un principio, el contemplado a asistir era el titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), Diódoro Carrasco Altamirano. Y es que tanto integrantes de Morena, como del Partido del Trabajo (PT), Partido Encuentro Social (PES), PRI y Partido Verde, vieron con malos ojos que el mandatario no se haya presentado en el recinto legislativo para la entrega de su informe con toda la información de los últimos 10 meses de su gestión, situación que se tradujo en una lluvia de críticas. Como respuesta del Congreso local, el presidente de la Mesa Directiva, José Juan Espinosa Torres, arremetió contra Gali Fayad por su ausencia y reprochó que le haya dado la espalda al Poder Legislativo, pues no sólo se ausentó a la sesión solemne de ayer, sino que tampoco se presentó durante la instalación de la Legislatura, y ha atacado el trabajo de los diputados mediante vetos a las reformas aprobadas.
“Hacemos respetuosamente un llamado para retirar los vetos al nuevo marco legal que ha dispuesto la mayoría parlamentaria. Si bien reconocemos que es una facultad del Ejecutivo, no lo es el sistemático bloqueo de las modificaciones legales, cuya presentación como plataforma electoral se tradujo en el voto mayoritario de los poblanos, la ausencia del gobernador, tanto en la instalación de esta Legislatura como el día de hoy, demuestra lo expuesto”, sentenció. Esto, a razón que el diputado petista también se lanzó contra los bajos resultados en temas de seguridad y política, al sostener que Gali Fayad deja de herencia una Puebla con severos grados de ingobernabilidad y delincuencia, así como impunidad, en especial en la violencia contra las mujeres. “José Antonio Gali deja sumida a Puebla en la peor crisis de seguridad en la historia, como consecuencia del contubernio entre autoridades y delincuentes, así como utilizar el presupuesto para cumplir obligaciones financieras de obras ostentosas, poco útiles, y desmantelar a los 217 ayuntamientos de forma presupuestal y operativamente”. Por su parte, la diputada del PT, Guadalupe Muciño, reprochó la falta, no sólo del titular del Ejecutivo, sino de Diódoro Carrasco, quien también, de último minuto, optó por desistir de ir al Congreso y, en vez de ello, mandar al titular de la SEP, Ignacio Alvizar.
“Deberíamos de señalar la ausencia del gobernador Antonio Gali Fayad, pero lamentamos más, que de última hora, Diódoro Carrasco Altamirano decidiera cancelar. Su cancelación representa una cobardía y una enorme grosería a este Congreso”. En tanto, del lado del PRI, Javier Casique Zárate señaló que si bien el alejamiento del gobernador Antonio Gali se debió al clima hostil que se vive en el interior del Poder Legislativo, también dejó dicho que la ausencia del mandatario no debía ser, en especial por el respeto a la soberanía. Así como se dio el reproche contra Gali Fayad, se recriminó la presunta participación del Gobierno estatal en la pasada elección, situación que hizo que el conflicto postelectoral fuera uno de los temas centrales con acusaciones por fraude, por elecciones de Estado y también por el clima de crispación y división que se vive en la arena política de Puebla.