Ahora hay más trabajadores que laboran jornadas de más de 48 horas a la semana, pero ganan hasta 5 mil 300 pesos.
Huffington Post
México es el país de los matices cuando de información económica se trata. En el último trimestre de 2017 disminuyó el desempleo a su tasa más baja desde 2005, pero lo hizo gracias al incremento de empleos muy mal pagados.
Entre octubre y diciembre de 2017 hubo en el país 1.8 millones de personas desocupadas, 3.3% de la Población Económicamente Activa (PEA). La cifra representa una disminución desde el 3.5% registrado en el mismo trimestre de 2016 y el nivel más bajo para un promedio anual desde 2005.
TASA DE OCUPACIÓN
Pero el empleo creció empujado por aquellos que trabajan muchas o pocas horas con sueldos menores a 5 mil pesos, es decir, los que están dentro de la Tasa de Condiciones Críticas de Ocupación, que pasó de 13.1% en el último trimestre de 2016 a 14.3% en el mismo periodo de 2017.
Entre los trabajadores en México con condiciones críticas laborales están aquellos que involuntariamente tienen jornada de menos de 35 horas semanales (de las 40 que suman los empleos de 8 horas diarias), los que trabajan más de 35 horas, pero con salarios menores a dos mil 650 pesos mensuales (1 salario mínimo) y los que laboran más de 48 horas, pero ganan hasta cinco mil 301 pesos (2 salarios mínimo).
Según datos de Citibanamex, el 36.4% de los 746 mil nuevos empleos provienen de plazas laborales con ingresos de hasta 7 mil 952 pesos mensuales (3 salarios mínimos), en detrimento de las 363 mil plazas que desaparecieron en los segmentos de salarios mayores a 3 mínimos.
“Se vislumbran en los resultados de la ENOE algunos puntos negativos. Quizá el más importante -en paralelo con los altos niveles de informalidad- radica en el hecho de que el crecimiento del empleo posiblemente estuvo apoyado en los segmentos de bajos ingresos”, se lee en el análisis de Citibanamex. Y son empleos de salarios bajos porque, literalmente, no alcanzan para casi nada.
A una persona que gana el mínimo en México, 2 mil 650 pesos al mes, no le alcanzaría para pagar los productos y servicios más básicos de una sola persona, costo considerado en la Línea de Bienestar Mínimo que conforma la canasta alimentaria y la no alimentaria.
El valor al mes de la canasta en la Línea de Bienestar mínimo es de 2 mil 986 pesos por persona para las zonas urbanas y de mil 933 para las rurales.
CONEVAL
Pero en México, un hogar tiene en promedio 4 integrantes, lo que significa que un hogar cuyo único ingreso es el de quien gana un salario mínimo en una zona urbana no podría comprar los alimentos y servicios mínimos para ninguno de sus integrantes.
Con dos salarios mínimos de ingreso (5 mil 301 pesos), solo ganaría lo suficiente para dar el mínimo de alimentos y servicios a solo 1 de los integrantes y le faltarían 671 pesos para dárselo a un segundo integrante. Con tres salarios mínimos (7 mil 952 pesos ), en un hogar mexicano solo tendrían el ingreso suficiente para dar el mínimo de alimentos y servicios a 2 integrantes y le faltarían mil 6 pesos para dárselos a un tercero. Y si te preguntabas cuántos dependen del ingreso por el trabajo, la respuesta es: la mayoría.
El 64.3 por ciento de los hogares en México tienen como principal fuente de ingreso el trabajo, solo del 15.6 por ciento son las transferencias -jubilaciones, pensiones, becas, dinero proveniente de otros países-, un 11.3 por ciento depende del alquiler de una vivienda y 8.8 por ciento de la renta de una propiedad, según datos del Inegi de 2016.
Esto significa que la mayoría de los hogares en México dependen del salario que ganan sus integrantes, aunque la buena noticia es que el promedio de integrantes que es económicamente activo es de 1.7 por familia.