El renacer de Ebrard
Marcelo Ebrard Casaubón, ex jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal, será, según lo anunciado, el próximo Secretario de Relaciones Exteriores. El próximo Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, adelantó, entre otros nombramientos de su gabinete, el de Ebrard. Si bien es cierto que se le veía como potencial secretario, las carteras en las que se le tenía considerado tenían más que ver con temas de su conocimiento, tales como: seguridad pública y gobernación. Su paso como funcionario de AMLO en la jefatura de Gobierno le dio las tablas en materia de seguridad para poder promover su candidatura y relevar al tabasqueño. De no haber sido por el trágico incidente de Tláhuac, su expediente en esta delicada área hubiera llegado intacto. Retomando el nombramiento al que fue propuesto, otro factor que llama a la atención es el fondo de la misma. ¿Por qué enviarlo a hacer la política exterior? La respuesta a esta interrogante, probablemente, obedezca a la intriga palaciega de personajes como: Alfonso Romo y Ricardo Monreal. Tener a Ebrard placeándose en una cartera en el país no les conviene para nada. La intención es concreta: alejarlo lo más posible de la arena nacional. En los juegos del poder que vienen, se vislumbra mucho golpeteo. Hoy, por lo mientras, resucitaron al perseguido y autoexiliado Marcelo. Dicen que, en la política, nadie está muerto para siempre. El carnal Marcelo es un ejemplo.