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Exclusivas Puebla
Jacobo Martínez Ramos, empresario y dueño del Hotel Banyan Tree (antes Azul Talavera), fue denunciado por el Gobierno de Puebla ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por los delitos de daño en propiedad ajena y daños en monumentos históricos, tras haber intervenido ilegalmente en la zona de Los Lavaderos de Almoloya.
La denuncia por ambos delitos es debido a que el túnel que da acceso entre Los Lavaderos y el Jardín de las Trinitarias era usado para fiestas privadas.
La denuncia se dio luego de que el pasado 29 de mayo el gobierno de Miguel Barbosa recuperó los espacios de Los Lavaderos, los túneles y el Convento de las Trinitarias.
“El haber puesto de conocimiento de la autoridad investigadora los hechos de San Francisco, era una obligación de la autoridad, para que se determinen las responsabilidades ante las fiscalías correspondientes”, puntualizó el gobernador.
Cabe recordar que Los Lavaderos de Almoloya se entregaron –durante el gobierno de Rafael Moreno Valle– a un particular a través de un fideicomiso y se hicieron diversas modificaciones para ampliar el hotel, incluso colocando un bar en las inmediaciones del sitio histórico.
En ese momento el empresario trajo al Hotel Rosewood como una de las franquicias más exclusivas y meses después la perdió. El lugar cambió a Azul Talavera, con una inversión de 40 millones de pesos.
Con el gobierno de Antonio Gali iniciaron los daños en el área fundacional y convirtieron el drenaje de Los Lavaderos en túneles donde cobraban por recorridos.
La alteración en la construcción de la zona de Los Lavaderos de Almoloya provocó daños a su estructura subterránea, al grado de representar un riesgo de colapso, informaron autoridades del INAH.
