Desde octubre de 2018 a la fecha, las actividades de trasiego de estupefacientes han reportado un crecimiento de casi el 300 por ciento
Infobae
Solo ha pasado un mes desde que el presidente Donald Trump le impuso a México un año como límite para que detenga el tráfico de drogas en la frontera, o de lo contrario, según él, aplicará aranceles a automóviles o cerrará el paso entre ambos países. “Vamos a darles un plazo de un año, y si las drogas no paran considerablemente, vamos a imponer aranceles a México y sus productos, en particular los autos. Y si eso no tiene las drogas, entonces vamos a cerrar la frontera”, afirmó Trump desde la Casa Blanca frente a decenas de periodistas. Sin embargo, en su último reporte la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) informó que desde octubre de 2018 a la fecha se ha incrementado exponencialmente el trasiego de drogas en la frontera.
LA CBP detalló que en ese período las autoridades estadounidenses incautaron 55 mil kilos de marihuana, 14 mil de cocaína, 12 mil de metanfetaminas, mil de heroína y 425 de fentanilo. En otras palabras, esto quiere decir que los decomisos de drogas duras en la frontera, particularmente los casos de la metanfetamina y la heroína, aumentaron considerablemente de 2017 a 2018. En general, las actividades de trasiego de estupefacientes en este período han reportado un crecimiento de casi el 300 por ciento. Y con base en los reportes de la CBP de 2019, todo parece indicar que la tendencia creciente de decomisos continuará en lo que resta del año. Para algunos expertos este fenómeno podría significar dos cosas: los consumidores son cada vez más o los cárteles mexicanos están trasladando mayor cantidad de mercancía. Guillermo Valdés, ex director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, aseguró a Milenio que esto confirma que el tráfico de drogas sigue siendo la actividad más redituable para el sector criminal.