El primer campeón de goleo camotero se mostró nostálgico por su recibimiento
Por: Ada de los deportes / @adadlosdeportes
Fotos: Cortesía Manuel Vela
Un 7 de mayo de 1944 nació en la capital poblana una historia futbolística que, a través de los años, ha logrado mantenerse en el corazón de sus más fieles seguidores a pesar delos altibajos que ha sufrido durante su existencia.
Hoy, 7 de mayo de 2018, el Club Puebla celebró sus 74 años de vida teniendo como invitado de lujo al primer campeón de goleo del equipo: Carlos Muñoz Cobos, quien engalanó la celebración junto a su gran amigo Carlos “Búfalo” Poblete, y quien además convivió con 74 abonados seleccionados al azar por la gente del equipo camotero.
Antes del inicio de esta magna celebración, el histórico Carlos Antonio Muñoz Cobo, atendió a la prensa deportiva, ante la cual expresó su emoción por el gran recibimiento que, tanto directiva del club como afición y medios, le brindaron a su llegada a la Angelópolis, a su casa.
“Gracias a ti, gracias a la gente que me ha invitado que es algo lindo, sobre todo el recuerdo de tanta gente. Venir después de tantos años y que en los 74 años la gente te reconozca y que te traten como me están tratando a mi es difícil de asimilar. Yo en este momento estoy un poco, no sé, no sé si es agradecimiento, no sé si es un honor que no me merecía, no sé qué es lo que siento que no sé cómo expresarlo. Pero no me queda más que dar las gracias. Y sí, mi casa es porque aquí dejé buenos amigos, aquí me trataron de maravilla y aquí estuve 4 años en Puebla que eso no se le olvida a nadie”.
El ex – delantero, nacido en Úbeda, España, recordó cómo fue su llegada al equipo camotero, que se dio por obra de la casualidad.
“Yo llegué de casualidad. Primero porque acabo con el Oviedo tengo 1 año más de contrato, pero hay problemas con la directiva y me contactan para firmar con el Atlante, un intermediario español. Y me dicen que tenía que ir al Atlante. Y a los 15 días me dijeron que no era Atlante, que tenía que ser Puebla. Al final decidimos venir y venimos”.
Justamente, sobre su llegada a tierras poblanas y su primera vez en el “Coloso de Maravillas”, Estadio Cuauhtémoc, Muñoz Cobo recordó que “la primera vez que vine me acuerdo que estaban proyectando unas imágenes, que el primer día que bajé al campo a saludar a los compañeros me tuve que sentar 3 veces porque dije: uuhh, aquí no puedo jugar fútbol. Pero quedé sorprendido, porque es un ambiente diferente, un país distinto, que no lo conoces, luego está el idioma. Pero yo en el momento en el que llegué, a los 3 días ya me sentía en casa porque vino muchísima gente que no conocía a ofrecérmelo todo y fue rápida mi adaptación”.
Probablemente muchos no lo sepan, sobre todo los aficionados jóvenes a la franja, pero el primer campeón de goleo con 16 “dianas” de los enfranjados, militó en los Lobos BUAP en la temporada 2000, por lo cual, habló con tristeza de la situación que pasa la escuadra universitaria y a la cual le guarda un profundo cariño y agradecimiento.
“Yo con Lobos me alegré mucho (cuando subieron), de entrada soy lobero, yo viví dos años allí y en ese equipo yo fui parte de la primera franquicia que se formó. Y estoy triste porque ha bajado, yo creo que 2 equipos para la ciudad es bueno, no para el Puebla, no para Lobos”.
Durante el evento, Carlos Muñoz firmó autógrafos a los abonados presentes, con los cuales recordó anécdotas de su paso por el fútbol poblano.
La cereza del pastel fue el momento del pastel, que fue cortado por el emblemático jugador, quien estuvo acompañado por gente de la directiva camotera que encabeza Manuel Jiménez.