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Jesús Lemus
El candidato priista a la gubernatura de Puebla, Alberto Jiménez Merino, aseguró que en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) no hay elementos para un cambio de candidato y quien difunde ese rumor es porque tiene una “mente perversa en estas elecciones”. Lo anterior, tras señalar que sus vínculos con el ex gobernador Mario Marín Torres -quien tiene una orden de aprehensión por el delito de tortura- no significa que le quiten la nominación. Jiménez Merino señaló que si existen los rumores de su relevo como candidato es porque sus adversarios políticos temen al crecimiento electoral que tiene, a tres semanas de campaña. “Considero que son esas mentes perversas las que afirman que hay un relevo de candidato, pero no es así, estoy más firme que nunca para seguir compitiendo, para seguir construyendo un nuevo comienzo en Puebla”, declaró el ex funcionario de gobiernos priistas.
Merino mencionó que, a diferencia de su adversarios de Juntos Haremos Historia, Miguel Barbosa Huerta y Enrique Cárdenas Sánchez, por el PAN, PRD y MC, no tiene denuncias por enriquecimiento ilícito o señalamientos de corrupción. Sentenció que su candidatura es legítima y la defenderá durante las semanas siguientes de campaña, para demostrar a los poblanos que hay las condiciones de generar un nuevo comienzo en Puebla, una vez que concluya el proceso electoral.