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Lizzet Pérez
A dos meses de que la nueva administración asumiera el gobierno municipal, el tesorero del Ayuntamiento de Puebla, Héctor González Cobián, dio a conocer este martes, el déficit económico heredado por la administración anterior, encabezada por Adán Domínguez Sánchez.
En rueda de prensa, el funcionario reveló el monto total de la deuda, que contempla un presupuesto de 547 millones de pesos. En su intervención detalló cómo se desglosa dicha cantidad.
El primer rubro corresponde a un faltante bancario de 333.9 millones de pesos, resultado del compromiso de pago que no fue respaldado en las cuentas bancarias.
En un segundo término hay un hoyo financiero de 117 millones de pesos en compromisos contractuales con recursos de los meses de noviembre y diciembre, estos contratos son principalmente en temas de obra pública.
El tesorero mencionó la cantidad de 96.2 millones de pesos en relación a rubros prioritarios que, tenían que estar incluidos en el presupuesto, sin embargo, no se incluyeron.
La contralora municipal, Dulce Lilia Rivera Aranda, comentó que se abrieron las investigaciones con apego a la normatividad, y en caso de que arrojen una responsabilidad, habrá sanciones e incluso puede haber denuncias penales.
El secretario de Gobernación, Franco Rodríguez Álvarez, dimensionó las inconsistencias financieras al señalar que corresponden casi al 10 por ciento del presupuesto del Gobierno de la Ciudad, lo que demuestra un desorden administrativo; señaló que fueron utilizados recursos que no correspondían ejercer y bajo el supuesto de que habría una recaudación exitosa.
En ese sentido, expuso que el Gobierno de la Ciudad está tomando las previsiones financieras correspondientes para la detonación de proyectos en la ciudad de Puebla en 2025, de manera conjunta con el gobernador Alejandro Armenta, de quien reconoció su generosidad con el municipio.