El arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, ofreció misa dominical desde la Catedral de Puebla, donde pidió por las familias víctimas de la violencia en el país, pues dijo, “la vida y la familia son sagradas”.
Daniela Rojano
El arzobispo de Puebla, expresó que lamentó que sea “costumbre” que todos los días aparezcan personas ejecutadas y se registren enfrentamientos entre grupos delictivos, por lo que convocó a reforzar los valores desde las familias mexicanas para frenar la ola de violencia que aqueja a migrantes, desplazados por el crimen organizado, las personas desaparecidas y sus madres, quienes llegan a perder la vida en su búsqueda.
En la misa dominical, comentó que México atraviesa por momentos de inseguridad, pobreza y desigualdad social. “Estamos viviendo tiempos muy difíciles de violencia, de inseguridad, lo vemos en las noticias ya se nos está haciendo costumbre escuchar que un atentado allá, que unos desaparecidos aquí, que unos levantados por otro lado, que desaparecidos y después encontrados muertos”, expresó.
Agregó que todos los días hay atentados contra la vida y consideró que la sociedad debe estar siempre viendo a favor de esta y de las personas. Las familias deben asumir el compromiso y tarea de acompañar y educar a sus hijos en la paz, de fomentar buenos valores.
“No pueden poner otra cosa por encima de él, la familia es importante, la vida es importante, los valores que son virtudes para nosotros los cristianos pues es parte del proyecto de Jesús y esto no solo vale para las relaciones familiares, también afecta cualquier forma de organización en la iglesia y en la sociedad”, dijo el arzobispo de Puebla.