🎧 Usa el reproductor para escuchar esta nota
A pesar de que la fecha para dictar sentencia se aplazó hasta julio, sus parientes tienen poca esperanza de que regrese
Infobae
Sobrinos, primos y pistoleros de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera ya perdieron las esperanzas de que el narcotraficante mexicano vuelva a pisar alguna vez Sinaloa, su tierra natal y donde construyó su emporio. Guzmán Loera fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, desde entonces permanece en una prisión de alta seguridad en Manhattan donde espera que se le dicte sentencia después de haber sido encontrado culpable de una decena de cargos relacionados con el tráfico de drogas y lavado de dinero. Se espera que su sentencia sea de cadena perpetua. “Nosotros sabemos que el tío (Guzmán Loera) ya no va a regresar. Desde el principio supimos que era un juicio perdido, y aun así teníamos esperanza que ganara, pero era difícil.
Desde que se lo llevaron a Estados Unidos fue difícil que las cosas salieran a su favor”, señaló al semanario mexicano Río Doce un sobrino del Chapo, quien pidió que se le identificará con el apodo de “Comandante”. “El Cacho”, otro de los familiares de Guzmán, aseguró que el cártel mantiene retenes en toda la sierra para tratar de impedir el ingreso de otros grupos criminales, como “La Línea”, que opera en Chihuahua. De acuerdo con la información obtenida por la publicación, el territorio que pertenecía a Guzmán Loera quedó bajo el mando de la familia, ya sean hijos, hermanos, primos y sobrinos y compradores de droga que antes rendían cuentas, pero, luego de su detención y extradición se quedaron con territorio o su cartera de clientes. “Nosotros no nos movemos de aquí (de San Miguel, Badiraguato), y hay que estar pendientes y bien comunicados en caso de que algo se presente porque si esa gente (del Cártel La Línea) entra para acá, se van a poner muy feas las cosas”, señaló “El Cacho”, de 49 años, otro familia de Guzmán Loera.