Eduardo Sánchez
La violencia en el estado de Puebla continúa a la alza durante los últimos meses a pesar de las acciones implementadas por el Gobierno para frenar el despunte de delitos, mismos que, en un periodo de tres años, han aumentado en 60 por ciento el impacto económico per cápita. El impacto económico tiene una relación con el nivel de violencia en la región, aunque algunos delitos son más costosos, por lo que pueden crear una variación significante, según el Índice de la Paz en México. Este reporte ha calificado a Puebla como el séptimo estado más pacífico en el último año a pesar del alza en los homicidios, robos a comercio y transporte público. Sin embargo, el precio por el aumento de delitos le ha costado a cada poblano 21 mil 610 pesos. De manera general, al Estado le ha costado 159.3 mil millones de pesos el aumento de violencia en el último año, y es importante destacar que, el principal costo se debe al delito de homicidio, mientras que el gasto de seguridad y del sistema judicial son los que menor impacto representan. En 2017, Puebla vivió uno de los años más violentos en su historia, pues los homicidios dolosos incrementaron en un 55.85 por ciento, mientras que el robo de vehículos en un 122 por ciento.
LA VIOLENCIA AUMENTA EN 60 POR CIENTO EN TRES AÑOS
De acuerdo con el reporte del impacto económico de la violencia per cápita de 2015, Puebla tuvo una calificación del Instituto Poblano de las Mujeres (IPM) del 2.24 puntos, mientras que el impacto económico fue de 13 mil 451 pesos por persona en aquel año.
Para 2016, la cifra tuvo un aumento de más de cinco mil pesos por habitante, alcanzando los 18 mil 300 pesos. En este año, el estado de Colima reportó el mayor impacto económico de la violencia per cápita, con 66 mil 500 pesos por habitante. Para 2017, la cifra logró rebasar los 20 mil pesos, lo que se traduce en un aumento del 60.6 por ciento, al pasar de 13 mil 451 pesos a 21 mil 610, donde el IPM señala que, dado el alto costo del homicidio, algunos estados padecen más el impacto económico de la violencia. A nivel nacional, el impacto económico de la violencia aumentó 15% en 2017, para un total de 634 mil millones en pérdidas adicionales. Esto, posterior a un incremento de 10% en el impacto económico de la violencia en 2016.
FUGAS DE DINERO EN INSTITUCIONES SIN EFECTIVIDAD
Aunque el menor porcentaje de impacto económico recae en las instituciones de seguridad, estas tienen un valor agregado, pues el gasto que invierten, se desvía de los recursos de desarrollo social y económico. El índice refiere que Puebla se encuentra entre los primeros diez estados con mayor “paz positiva”, gracias a la ausencia de violencia y no al trabajo de instituciones como la Secretaría de Seguridad Pública (SEP). En este rubro, Puebla se ubica como el tercer estado en destinar pocos recursos humanos y financieros a la procuración de justicia, lo que se traduce en la imposición de altas cargas de trabajo a sus ministerios públicos. Asimismo, la Fiscalía General del Estado de (FGE) de Puebla, a cargo de Víctor Carrancá Bourget, ha sido calificada con el peor desempeño a nivel nacional, pues la probabilidad de esclarecimiento de delitos en la entidad es de un 1.01, entre otras deficiencias.